El juego de hoy consiste en identificar esta imagen:
¿Sabéis
qué es y dónde se encuentra?
Se abrazan:
Sí, no había trampa: es la Bocca della Verità, una gran máscara datada en el siglo I que podemos ver en el pórtico de Santa Maria in Cosmedin, en el Foro Boario.
No se sabe si, en su origen, la Boca fue fuente o cloaca. Si, en efecto, fue tapa de alcantarilla... ¡en bonito lugar nos dedicamos a meter alegremente nuestra mano!
La pregunta de esta semana ha sido tan fácil que algunos amigos han llegado a dudar... El enigma de la próxima semana será un poco más complicado. Solo un poco.
***
Adelanto la respuesta.
La chica se aproxima, cautelosa:
El chico le da un susto:
Sí, no había trampa: es la Bocca della Verità, una gran máscara datada en el siglo I que podemos ver en el pórtico de Santa Maria in Cosmedin, en el Foro Boario.
No se sabe si, en su origen, la Boca fue fuente o cloaca. Si, en efecto, fue tapa de alcantarilla... ¡en bonito lugar nos dedicamos a meter alegremente nuestra mano!
La pregunta de esta semana ha sido tan fácil que algunos amigos han llegado a dudar... El enigma de la próxima semana será un poco más complicado. Solo un poco.
Sí, sé que es y donde está ubicada, pero hasta que Carmen no lo descubra yo no diré nada.. Sé que es muy antigua, que sus funciones no están claras, que su ubicación actual no es la de principio, que tiene una leyenda, está en una ciudad llena de arte y, como otros monumentos, la gente que los visita sigue la leyenda o tradición...
ResponderEliminarPues, la verdad, mejor no abriré la boca, porque creo saber que es y donde está, pero todo lo demás lo desconozco.
ResponderEliminarLo que sí puedo decir, es que el día qe vaya a esa ciudad, todavía no he tenido esa suerte, no creo que me atreva a seguir la leyenda. Es vergonzoso, lo sé, pero soy una crédula de lo peor.
Haces bien en no abrir la boca, Harry: ¡somos capaces de meter la mano dentro! :)
EliminarSuni y Harry, qué discretas sois las dos... Pues verás, Harry, os contaré una cosa que te dará la razón en eso de no seguir la leyenda... por si acaso. Aunque yo sí que lo hice.
ResponderEliminarCuenta, cuenta... que nos tienes en ascuas.
ResponderEliminarY... una pregunta... indiscreta... si me permites hacerla, valiente...
¿Tienes algo en común con Cervantes?
Ni el bigote ni la barba. Pero cualquier día me da un pronto y, como Pierre Menard, escribo El Quijote.
EliminarEsta es fácil, la sé hasta yo... y yo Harry tampoco porsi
ResponderEliminarCalla, calla, que los amigos en Facebook andan revueltos diciendo que no puede ser, que hay algo oculto, que me guardo un as en la manga... ¡Con lo buena que soy! ;)
EliminarCreo que pondré la solución mañana. ¡Y el domingo, nueva entrada!
A todo eso... ¿de verdad creéis que es lo que creéis que es? ;)
Yo en verdad lo creo, pero es que soy de natural crédulo e ingenuo, jejeje.
ResponderEliminarGRACIAS Carmen por ese abrazo amistoso, que no sé yo, si el muy pillín la dio el susto con esa idea.
En lo de acertar, es cierto que al principio dudé (y eso que según la vi me pareció saber lo que era) ; no podía ser tan fácil, pero después pensé que por qué no.
He leído, aunque no sé si es verdad, que Gregory Peck le gastó una broma a Audrey Hepburn, de modo que el susto de esta fue auténtico y las posteriores carcajadas de ambos, espontáneas. Al director, William Wyler, le gustó tanto la escena que decidió incluirla en la película. No sé si es cierto o no, pero si te fijas en la cara de Peck, la suya no parece una "risa de actor", sobreactuada, sino una risa de verdad. Así que, sea real o no la anécdota, "se non è vero, è ben trovato".
EliminarEntonces, qué nos atrae de esta obra? Sólo su leyenda y por supuesto se hizo famosa por la escena de cine de G. Peck ..
ResponderEliminarHay que reconocer que Gregory Peck y Audrey Hepburn ayudan mucho, pero la máscara en sí, con o sin leyenda mordedora, tiene un gran atractivo.
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