miércoles, 19 de agosto de 2015

El hombre a quien asustaba su sombra




En muchos cuentos y leyendas, las hadas se reúnen en torno a la cuna del recién nacido para concederle sus dones. Sobre la cuna del hombre que hoy nos visita se congregaron, según refiere, unos ángeles tristes: el miedo, la pena y la muerte que, nos dice, estuvieron a su lado desde que nació. Son esas las cosas que nos cuenta este artista que afirmaba haber heredado de su padre “la semilla de la maldad” y que le daba miedo su “propia sombra a la luz de la luna”. 


Noche de verano en la playa, colección particular, 1902-03

¿Sabéis ya de quién hablo? Porque os propongo que, a través sus propias palabras y de las imágenes de algunas de sus obras, descubráis su nombre. Os adelanto unos pocos datos: murió a los ochenta años; se le vio, a menudo, por las calles de París, aunque también vivió en Berlín y otros lugares de Alemania; en una ocasión, diseñó decorados teatrales; tuvo pésimas relaciones con los nazis. 

El manzano, 1902

Empiezo con las citas:
“Mi arte tiene sus raíces en una sola reflexión: ¿por qué no soy yo como los demás?”.


Bosque en otoño, 1919-20

Costa con casa roja, 1904

“Hay una batalla que tiene lugar entre hombres y mujeres. Muchas personas lo llaman amor”.


Consuelo en el bosque, 1924

Cupido, 1907

Noche de verano, colección particular, 1899

“La muerte está a oscuras, pero los colores son luz. Para ser un pintor, hay que trabajar con los rayos de luz”.


Coqueteos en el parque, 1942

Noche estrellada, 1922-24


Pleno verano, 1915


“Pinto de memoria las impresiones de mi infancia”.

 
Niños en un camino, 1906

Niños en el bosque, 1901-02

Danza en la playa, Narodni Muzej, Belgrado, 1899-1900

“Todo el que percibe los colores puede convertirse en un pintor. Es simplemente una cuestión de si se ha sentido algo o no y si uno tiene el coraje de contar las cosas que uno ha sentido”.

 
La tormenta, Museum of Modern Art, Nueva York, 1893

Noche estrellada, Von Der Heydt Museum, Wuppertal-Elberfeld, 1893

“No queremos pintar cuadros bonitos para colgar en las paredes del salón. Queremos crear, o al menos sentar las bases de un arte que le dé algo a la humanidad. Un arte que los atraiga y enganche. Un arte creado desde el corazón más íntimo”.

Primavera en el bosque II, 1923

Bosque, 1903


“El espectador debe adquirir conciencia de lo que la pintura tiene de sagrado, de modo que se descubra ante ella como en la iglesia”.


Cabeza de mujer sobre fondo rojo, 1893-94

Mujer sentada en la playa, 1906-07






La boda, boceto, 1925-30

Noche de verano, colección particular, 1902

“Un ave de presa está desgarrando mi alma. Sus garras destrozan mi corazón. Su pico hurga en mi pecho. Y el batir de sus alas oscurece mi juicio”.


Desnudo en el bosque, 1924-25

"¿Estoy en el infierno?".


Mujer a la orilla del mar, 1896

¿Quién es este gran y desolado artista? ¿Qué os parecen sus pinturas, qué os sugieren?


***

Nada, no hay forma de pillaros. ¡Lo acertáis todo! De las cuatro versiones de este cuadro he escogido la que se conserva en la Galería Nacional de Noruega, en Oslo. Otras dos versiones se hallan en el Museo Munch, también en Oslo, y la cuarta en una colección particular.



Edvard Munch, El grito, Nasjonalgalleriet, Oslo, 1893



 

26 comentarios:

  1. ¡Es Edvard Much! Lo he adivinado a la primera, no me lo puedo creer.

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    1. El viernes confirmaremos si es Munch o alguien que se parece a Munch (musiquilla de intriga, sonrisa esquinada). ¿Qué te parecen las obras? ¿Y las frases que escribía?

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  2. Yo también me apunto a la tendencia general. Munch. Es difícil no ver en esas pinceladas a otro que no sea Munch.
    Gracias por tu maravilloso post, Carmen.
    Con tu permiso, lo comparto.

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    1. Sin permiso, sin permiso, que no hace falta ;)
      "La pincelada delatora". Me has hecho pensar en una historia en la que una pincelada, una sola pincelada, revela... ¿qué revela? ¿Un crimen? ¿Esa pincelada es la firma del asesino? ¿Es el último mensaje de la víctima? ¿Es la declaración camuflada de un testigo? Tendremos que esperar a que venga Josevi Blender para aclarárnoslo.
      Un abrazo, Elisenda, y muchas gracias.

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  3. Muy bueno Carmen, yo también me apunto a Munch. Me quedo con esta frase: “La muerte está a oscuras, pero los colores son luz. Para ser un pintor, hay que trabajar con los rayos de luz”.
    Sus frases transmiten desolación y sensación de soledad... Gracias Carmen!

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    1. Una soledad y una desolación inmensas, Pepa. Pero qué obras tan magníficas nos dejó.

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  4. E. Munch. He hecho trampa porque andaba dudosa; sus trazos me sonaban, pero... hasta que algo me gritó que era él. Vale el chiste es tontorrón, pero viene al pelo.
    Me encanta. Sobre todos los paisajes. Las frases algo menos, pero comprendo perfectamente su pesimimo, ahora que me he enterado de algunas cosas. No sabía de su vida solitaria y angustiosa. Realmente no sé si hay hadas, aunque espero que sí, pero es muy cierto eso de que algunos nacen con estrella y otros estrellados. O en una época en la que mejor no haber nacido, no sé.
    Pero es verdad que supo expresar con su propio estilo aquello que le rodeaba. Supo darle belleza a cosas desgarradoras y mostrarla tal cual, a las que ya lo son. ¡Ójala hubiese sido una persona feliz! aunque nos hubiesemos perdido estas maravillas.
    GRACIAS Carmen, precioso el post

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    1. Esas voces que gritan... ¿Estás segura de que no eran las hadas?
      Sea quien sea el pintor ;), no cabe duda de que extrajo mucha belleza de su sufrimiento, pero tienes razón, da algo de pena su vocación por la desdicha.

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  5. Yo creo que es Edvard Munch. Su carácter atormentado y sus pinceladas alargadas como sombras fantasmales lo caracterizan o al menos a mi me lo parece. Muy bien preparado el acertijo.
    Un saludo

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    1. Lo que digo: la pincelada delatora ;)
      Por no hablar del carácter atormentado del artista. Qué diferencia con Dufy, ¿verdad?

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  6. Se le nota angustiado y desolado. Me gusta su obra. También sus frases. Es sugerente la idea de pintar de memoria, aunque esta sea muy traicionera y falsa. Es un pintor diferente. También pienso en Munch.

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    1. ¿Ni uno de vosotros me va a decir otro nombre? Nada, que no hay manera.
      Pintar de memoria, y más aún las impresiones de la infancia, supongo que es transmutarlas en algo nuevo, completamente distinto. Pero no lo sé. No pinto.

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  7. Creo que es Munch, conozco pocas obras de él y ninguna está aquí, aunque la que pones del MoMA creo haberla visto allí. Muchos de los cuadros que pones recuerdan, en colores y formas los cuatro "Gritos". Me has descubierto algunos cuadros preciosos como "Costa con casa roja" y las "Noche de verano".
    Bueno, ya veré si acerté. Precioso como siempre.
    Un beso.

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    1. Es verdad, colores, formas... y pinceladas evocan con fuerza obras muy conocidas de Munch, como las cuatro versiones de El grito. Mañana saldremos de ¿dudas? Un abrazo, Rosa.

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  8. Rzeczywiście w obrazach Muncha jest coś niepokojącego, nie dającego spokoju. Wyczuwa się niepewność i nerwowość. Intrygująca sztuka i malarz!
    Obraz przedstawiający kobietę wpatrzoną w lazur morza jest wspaniały, zastanawiający. Takie dzieła się pamięta.
    Dziękuje Carmen za kolejną , piękną opowieść o sztuce....

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    1. Tak, one są bardzo niepokojące, obrazy pełne złe samopoczucie i samotność.
      Dziękuję, Renne.

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  9. Me daba miedo de mi misma no entender la belleza de las sombras de adentro de uno...intui que el color y la luz enmascaraban la verdadera obra de la FORMA,sinuosa....desgarros...contradicciones,luz neutra amarronada.....cuando apareció El Grito lo escuche mas que nunca....por eso es necesario lo que escribes....abrazo fraterno,vic

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    1. ¿Pero el color y la luz son máscaras o gritos también, Vic?
      Con qué fuerza se advierte que la pintura se escucha...
      Un fuerte abrazo, Vic.

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  10. Las pinceladas sinuosas que se aprecian ya en las primeras pinturas que muestras me han hecho pensar en Munch. Espero haber acertado como lo han hecho los otros comentaristas. Me encanta la manera a modo de acertijo sobre la que has construido tu entrada. De esa forma, has conseguido mantener el interés por el contenido hasta el final, aunque, sabes y todos sabemos también, que estaba asegurado desde el principio. Eres una estupenda narradora de cuentos e historias ¿Puedes creer que en mi viaje a Botsuana he imaginado lienzos pintados en los que se reflejaran las doradas e inmensas sabanas? ¿Sabes de algún artista que haya captado esa belleza? Me gustaría contrastar su visión con la que yo me he traído de allí. Un besazo, Carmen

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    1. ¡Qué tema tan sugerente me propones, Carmela! Voy a investigar. Y te aviso, porque te lío para que seas tú quien comentes las obras en la entrada, hablando desde tu experiencia. ¡Avisada quedas, compañera! Un abrazo extenso como una sabana, intenso como la bellísima África.

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    2. Mucho confías en mi criterio, Carmen. Es una oferta un poco arriesgada por tu parte, pues puede desmerecer tu trabajo y esfuerzo.

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    3. ¡De eso nada! Tú dame tiempo para rastrear, y busca tú también. Ya verás cómo nos divertimos y nos sale algo precioso.

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  11. Según iba viendo los cuadros esas pinceladas me llevaban a Munch. Y no solo el nombre sinó el cuadro "el grito de Edvard Munch". No adivinaba el nombre sinó el cuadro. Me ha encantada este juego a adivinar su autor. Un abrazo.

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    1. Sí, pincelada a pincelada nos arrastraba a todos... Un abrazo, artista (¿sabes que me encanta eso de decirte "un abrazo, artista"?).

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  12. Hola Carmen,
    He reconocido a Munch por estas frases lapidarias que sé que escribió en su cuaderno de anotaciones: “Un ave de presa está desgarrando mi alma. Sus garras destrozan mi corazón. Su pico hurga en mi pecho. Y el batir de sus alas oscurece mi juicio”. Es él, sin duda. Y además, investigando sobre su vida para hacer una entrada hace unos meses, me enteré que su padre era un fanático religioso que implantó una moral regia y autoritaria, su hermana padecía un transtorno mental. Murieron pronto su madre y hermana y él mismo padeció una patología nerviosa que le llevó a un psiquiátrico del que salió restablecido. Pero sufrió mucho a casa del alcohol y por sus relaciones. Sus trazos y la forma de trabajar la línea, tan esquemática y los colores que no reflejan la realidad tal cual sino un pronunciado simbolismo hacen que me decante por él. Lo de El grito ya es que la cosa lo demandaba a gritos, jajaja.
    Estupenda entrada. Muchas gracias por tu creativa genialidad a la hora de expresar sentimientos y manifestaciones del alma desde el punto de vista del arte pictórico, reflejando a los grandes. Se agradece y mucho. Comparto, desde luego.
    Un beso

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    1. Una vida llena de dificultades y pesar, la de Munch. Cómo la expresa y transfigura a través de la pintura, y también de las palabras. Su genialidad, que no la mía, desde luego: a lo largo de esta entrada me he limitado a caminar, calladita, a su lado.
      Muchísimas gracias, Marisa. Un gran abrazo.

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