miércoles, 8 de julio de 2015

Xul Solar, recreador del universo




Ser Borges solo está al alcance de Borges, lo sabemos. Pero, ¿os imagináis ser uno de sus personajes? Eso es lo que le sucedió a Xul Solar, quien, en el cuento Tlön, Uqbar, Orbis, Tertius, aparece retratado como uno de los traductores de los idiomas del planeta Tlön. Ya adquirido el gusto de ser personaje de ficción, Solar apareció como el astrólogo Schultze en la novela Adán Buenosayres, de Leopoldo Marechal.

Xul Solar, Entierro, Museo Xul Solar, Buenos Aires, 1915

Alguien como Xul Solar, capaz de crear varias cosmogonías en una sola tarde y fundar doce religiones después de almorzar, merecía eso y mucho más. Es Borges quien nos refiere estas ocurrencias de Xul, su amigo e ilustrador. Porque Xul Solar, traductor, astrólogo, poeta, inventor y músico, entre muchas otras cosas, fue también pintor.   

Xul Solar, País, Rachel Adler Gallery, Nueva York, 1931

De joven, anduvo por Florencia, Milán, Londres, Munich, París y otras ciudades europeas, acompañado en ocasiones por un compatriota a quien esperamos ver pronto por aquí: Emilio Pettoruti.

Emilio Pettoruti, Mujer en el café, colección particular, 1917

Conoció en París a Picasso, a Modigliani, a Apollinaire; mantuvo contactos con  Kandinsky. ¿Conoció a Paul Klee? Porque es la obra de Klee, violinista como Xul, la que encuentra más resonancia en su obra.

Xul Solar, Paisaje celestial, 1933

Las obras de Klee y de Solar comparten varios rasgos. Entre ellos, hay un elemento de intenso simbolismo que se reitera: las escaleras.

Paul Klee, Composición cósmica, Kunstsammlung Nordrhein-Westfalen, Dusseldorf, 1919
 
Xul Solar, Fecha patria, 1925

Escaleras que a la vez son caminos recorren las ciudades de Xul y ascienden hasta el cielo, tan próximo, tan al alcance de la mano.

Xul Solar, Barrio, Museo Xul Solar, Buenos Aires, 1953

Xul Solar, Ciudad Lagui, 1939

Estos caminos-escaleras son imprescindibles para ascender a las montañas y sus moradas:

Xul Solar, Montes de nueve torres, 1949

Xul Solar, Barreras melódicas, Museo Xul Solar, Buenos Aires, 1948

Xul Solar, Trogloditas, 1948

Xul Solar, nos cuenta Borges, a cada momento recrea el universo. El suyo es un cosmos poblado de escaleras, pero también de muros, ojos, ruinas, ciudades como abismos. 


Xul Solar, País Rojo Teti, Museo Xul Solar, Buenos Aires, 1949

Xul Solar, Nueve San Mástiles, Museo Xul Solar, Buenos Aires, 1951

Xul Solar, Ruinas, Museo Xul Solar, Buenos Aires, 1950

¿Esta obra no recoge la huella de Piranesi, de Thomas de Quincey, de Jorge Luis Borges, y no anuncia, de algún modo, la Relatividad de M. C. Escher?


Xul Solar, Muros y escaleras, colección particular, 1944

M.C. Escher, Relatividad, 1953

Y esta, ¿no nos habla de Metrópolis (1927) y de los diseños de Hugh Ferriss (1889-1962)?


Xul Solar, Ciudad abismo, 1946
Hugh Ferriss, Las ciudades del mañana

A veces, sobrevolamos las ciudades con una de las máquinas voladoras ideadas por Xul. 


Xul Solar, Vuel Villa, Museo Xul Solar, Buenos Aires, 1936

Las letras, las banderas, los astros y los símbolos se entreveran con personajes que, en ocasiones, son de origen precolombino.

Xul Solar, B.A., 1929

Xul Solar, Místicos, Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires, 1924

Xul Solar, Nana Watzin, Galería Vermeer, Buenos Aires, 1923

Como arquitecto, Xul Solar diseña edificios cuyas fachadas se llenan de color. En sus últimos tiempos, en el Tigre, desarrolla la serie de Fachadas Delta.


Xul Solar, Proyecto fachada Delta, 1954

Xul Solar, Proyecto fachada Delta

Xul Solar, Proyecto Pan Klu Delta, 1954

Xul Solar, Proyecto fachada Delta

Xul Solar también inventó dos lenguas: el “neocriollo" y la "panlengua”. Este tablero de "pan-ajedrez”, ideado por él, sirve para crear palabras:


Xul Solar, Tablero de pan-ajedrez

Xul Solar, Cartas de panlengua, Museo Xul Solar, Buenos Aires

Borges dijo de Xul Solar que era “hombre versado en todas las disciplinas, curioso sobre todos los arcanos, padre de escrituras, lenguajes, utopías, mitologías, huésped de infiernos y de cielos". Nosotros creemos a Borges. Siempre le creemos, incluso cuando nos miente. Con más motivo podemos creerle ahora, cuando todo lo que dice de Xul Solar es verdad.


Xul Solar, Troncos, Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires, 1919





19 comentarios:

  1. Es una entrada impresionante, Carmen. No conocía la obra de Xul Solar. Me descubres un mundo de sueños, de vida retirada en urbes ruinosas, laberintos borgianos que te seducen haciéndote guiños. Acércate, incauto. Estamos solos en eses caminos, en esas escaleras. Borges y Marechal, de la mano, van desgranando historias. No sé hacia dónde subimos.

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    1. Creo que te interesarán las aventuras lingüísticas de Xul, Daniel.

      Susana Aparicio Lardiés, que es quien me dio la idea, con un comentario suyo, de invitar a Xul Solar al blog, contaba esta mañana que había visto en la casa-museo del artista su juego de ajedrez, y que sus reglas eran complicadísimas.

      Si no me equivoco, los cuadrados representan sílabas; las piezas, letras y símbolos, y es a través de su combinación como se crean nuevas palabras.

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    2. Tendré que curiosear, porque es una aventura interesantísima: un ajedrez creador de nuevas palabras. Me gusta. Por lo demás, a mí me gusta el edificio Delta. Así podría ver hasta el mar. ¿Quién se apunta como vecino? Absténganse ruidosos, por favor.

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  2. Vaya. No conocía a Xul Solar, y no será porque el hombre no haya hecho cosas.
    Todas esas influencias o coincidencias con otros artistas no deja de ser sorprendente, pues cada uno, a pesar las similitudes tiene su propia manera de dibujarlo.
    Reconozco que me resulta algo extraño y de momento no puedo decir que me guste mucho; aún así se ve claramente que es un artista polifacético, original y curioso. No me extraña nada que haya sido un personaje de cuento.
    GRACIAS Carmen. No conocía a este genio y es una pena que su obra no esté más difundida. Al menos generalmente.

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    1. ¡Hola, Harry! Acabo de volver de Niza y desembarco ahora, de nuevo, en Buenos Aires. Qué buena es la imaginación, ¿verdad? Algo que, desde luego, no le faltaba al amigo Xul. Es estimulante.

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  3. Excelente trabajo. Es imposible hablar de Xul sin mencionar a Borges. No sé quien de los dos fue más influyente en el otro.
    Un saludo.

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    1. Sí, la duda es esa: ¿Borges creó a Xul, o Xul creó a Borges?
      El caso es que, hasta ahora, yo creía que Borges nos había creado a todos nosotros.
      Un abrazo, Yolanda.

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  4. No tengo perdón, no conocía a Xul Solar, y mira que me gusta Borges y la de cosas que este hombre ha hecho.
    Muchas gracias por la entrada, como de costumbre he aprendido un montón y me ha encantado conocer a este...no sé ni como calificarlo porque roza la genialidad. Un besín.

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    1. Tienes perdón, lo tienes... Y también tienes razón en lo de no saber cómo calificar a Xul Solar. No es fácil.

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  5. Cuando yo era jovencita y muy tímida me enamoré de Borges, no me importaba que él surcara los 80 y yo apenas los 20, ni que él fuera argentino y yo colombiana, claro que sentí unos inmensos celos de María jajaja!!... fue mi amor platónico.... me hubiese conformado con ser su lazarillo, su acompañante, pero ahora con los años, cuando con la vida he perdido la inocencia, vuelvo atrás la mirada, y de la mano suya Carmen y por su gracia, conozco a Xul Solar, y recuerdo con desmesura las razones que tuve para que Borges me llenara de amor. Un saludo,

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    1. Qué hermoso, Magdalena. No sabes cómo te entiendo, y no solo porque me parece imposible no amar a Borges. Verás, yo estaba fascinada por un sabio español, Julio Caro Baroja, que me llevaba también cerca de medio siglo. Incluso una vez, cerca de Itzea, su casa en Vera de Bidasoa, no me atreví a acercarme por temor a encontrarme con él: ¡sabía que me habría quedado paralizada y muda! Así que me conformé con seguir adorándole de lejos, a través de sus libros. Qué cosas nos pasan.

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  6. Tendré que explorar las fachadas delta en mis dibujos. Gracias Carmen

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    1. Espléndidos dibujos los tuyos, Josevi. ¡A lo mejor también eres un personaje de Borges! Un abrazo,socio.

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  7. Woooowww no conocía la obra de Xul Solar ¡Menudo descubrimiento! Gracias Carmen :)

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  8. Hola, Carmen. Te admiro muchísimo. Gracias, de corazón.
    Un abrazo "virtual" muy fuerte. Siempre que leo tus trabajos -porque son tuyos- en tu blog, me quedo con la sonrisa de satisfacción que me transmiten.

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    1. No hay nada que admirar. Con lo que me quedo es con tu sonrisa. ¡Eso sí que me gusta! Un fuerte abrazo, Araceli.

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  9. Compre un libro de imágenes para pintar sin saber que era de Xul Solar, sólo porque tengo algunos marcadores alemanes desde hace mucho tiempo y quería usarlos. Cuando llego a casa, me puse a leer los pocos textos del libro y me desayuno con que son pinturas de X.S. Me intrigó saber que colores llevaba originalmente, y ahí me metí en google y pasando por varios sitios, llegué a tu blog. Quisiera ver los originales, si es que están en algún lugar en Buenos Aires. Gracias por presentar tan bien a este creativo.
    Me

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    1. Hola, Roberto Óscar. Puedes visitar el Museo Xul Solar. Mira, te pongo aquí el enlace de la web:

      http://www.xulsolar.org.ar/index.html

      Si no me equivoco, también se pueden ver sus obras en el Museo Nacional de Bellas Artes y en Malba (Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires – Fundación Costantini).

      Un saludo.

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